Un violento ataque se registró en la asociación Consorcio Zona 2 de Ciudad de Dios, en el distrito de Yura, cuando un grupo de encapuchados armados abrió fuego contra vecinos que realizaban trabajos comunitarios para la ampliación de un área destinada a un parque infantil. El hecho dejó como saldo una mujer herida en el talón y una mascota con lesiones por proyectil.
De acuerdo con el testimonio del presidente de la asociación, los agresores llegaron en un vehículo blanco y dispararon a quemarropa contra la maquinaria que se utilizaba en la faena, poniendo en riesgo la vida de los socios que participaban en la jornada. El dirigente sostuvo que los atacantes no emitieron mayores amenazas, salvo las advertencias de paralizar los trabajos bajo amenaza de muerte.
La víctima, una vecina del sector, se encuentra estable, aunque con dificultades para caminar debido a la lesión en el pie. La comunidad ha iniciado una campaña de apoyo para cubrir los gastos médicos. En paralelo, los socios exigieron garantías para continuar con las obras, ya que aseguran que estas buscan el beneficio colectivo y no tienen relación con intereses de traficantes de terrenos.
El dirigente denunció que él y su familia han recibido amenazas previas de un grupo que se hace llamar “Los Negritos”, lo que ha incrementado su temor. Incluso afirmó que ha tenido que contratar seguridad personal mientras espera que la subprefectura emita las medidas de protección correspondientes.
La situación también afectó a una mascota del vecindario, que resultó herida por un proyectil durante el tiroteo. Según testigos, hasta el día siguiente el animal aún tenía incrustada la bala, lo que generó indignación entre los vecinos, quienes demandan atención veterinaria urgente y justicia para los responsables.
El caso ya está en manos de las autoridades competentes, quienes investigan la identidad de los atacantes, algunos de los cuales habrían sido reconocidos por los propios vecinos. La Policía evalúa los videos de seguridad para determinar responsabilidades y confirmar el uso de armas de fuego en el atentado.
Los moradores de Ciudad de Dios exigieron a las autoridades actuar con firmeza, pues consideran que la violencia registrada pudo haber terminado en una tragedia. “Estamos hablando de armas de fuego y disparos a quemarropa; esto no puede quedar impune”, reclamó el dirigente, quien reiteró su pedido de garantías personales para él, su junta directiva y los socios de la asociación.
